Vladimir Aguilar Castro

Análisis del acontecer político nacional e internacional. "Pensando el acontecimiento". Alain Badiou

Observatorio de Ecología Política de Venezuela

▼
▼

domingo, 27 de enero de 2019

Venezuela en el Consejo de Seguridad. Vladimir Aguilar

Venezuela en el Consejo de Seguridad
Vladimir Aguilar Castro
Universidad de Los Andes
Un sistema internacional de los vencedores
El Consejo de Seguridad se erigió en el órgano de los vencedores de 1945 luego de la segunda guerra mundial. Mucho antes de que esta culminara, los tres grandes (Unión Soviética, Gran Bretaña y Estados Unidos) en encuentros previos, buscaron garantizarse un sistema de balance de poder que les permitiera el mantenimiento de la paz a través de la fuerza. De allí en adelante todo es historia. La guerra fría que surgiría se daría en el contexto del sistema acordado primero en Teherán, luego en Yalta y finalmente en Potsdam.
Desde la primera guerra mundial se había impuesto el dilema entre los vencedores de entonces, si era preferible considerar a los alemanes como enemigos potenciales y a los bolcheviques como los enemigos reales. La historia le daría la razón a la tesis británica frente a la francesa: el enemigo a combatir serían los soviéticos, es decir, el socialismo.
Balance of power versus sistema hegemónico
La guerra fría sería la expresión de un sistema de concierto sostenido en un balance de poder, con la perspectiva de convertirse en un sistema hegemónico dependiente del forcejeo por áreas de influencia de dos de los vencedores: Estados Unidos y la Unión Soviética. El primer quiebre del sistema de 1945 que lo llevó casi al colapso fue la guerra de Corea en 1950. Luego volvería a reaparecer el fantasma de la confrontación con la crisis de los misiles en Cuba en 1962.
No hay Imperio inocente
Sería ingenuo pensar que los imperios son inocentes. Cada potencia sabe lo que se juega y lo que está dispuesta a sacrificar en conflictos de carácter regional. Venezuela es el potencial espacio de conflagración entre dos grandes que, aunque ya desapareció el Muro de Berlín, Rusia busca posicionarse como gran vencedor de la segunda guerra mundial. No es precisamente el retorno de la guerra fría. Se trata más bien del replanteo en el tablero internacional de los vencedores que construyeron el sistema de la segunda guerra mundial. Ciertamente como muchos lo han afirmado, Venezuela es un problema hemisférico que amenaza la paz regional y mundial, pero ahora no será precisamente por lo que ocurre a nivel doméstico sino porque la mesa está servida para una confrontación sin precedentes. Para los imperios lo nacional es secundario cuando se trata de posesión de recursos. Cooperación, autodeterminación y derechos humanos entre otros, se convierten en subterfugios cuando lo que está en juego son espacios de control territorial. Si Corea y Cuba fueron conflictos que no trascendieron a mayores nada impide que la de Venezuela sea de alto calibre visto los intereses en juego. La manera mentirosa, insolente, grotesca y canallesca de las diplomacias parte del Consejo de Seguridad, incluyendo la venezolana, así lo evidencia.
Angostura y los nuevos colonialismos 200 años después
Vaya manera de celebrar los doscientos años del Congreso de Angostura. De una lucha libertaria de independencia que marcó el inicio del fin de la presencia española en el continente, pasamos a ser presa de nuevos colonialismos en nuestra nación. ¿Estarán conscientes los dos presidentes actuales de Venezuela de la dimensión de lo que como República se está sorteando? Esperemos que sí, de lo contrario y por el bien del país, deberían ambos renunciar. 
a la/s enero 27, 2019 No hay comentarios.:
Compartir

jueves, 24 de enero de 2019

Venezuela: dos países dos presidentes. Vladimir Aguilar

Venezuela: dos países dos presidentes
Vladimir Aguilar Castro
Universidad de Los Andes

El contexto

Volvimos al principio. Venezuela regresa al punto de partida que se creia superado. La crisis que apuntaba a un desenlace que pusiera en jaque al poder constituido con la inmensa movilización del 23 de enero de 2019, derivo en una repolarización ahora con dos presidentes, ambos alejados de los términos establecidos en la Constitución tan reivindicada por los bandos en pugna.

La "comunidad internacional"

La llamada "comunidad internacional" juega con fuego. No ubica que la solucion que se pretende para Venezuela puede significar un nefasto antecedente a nivel regional. Una "nueva" manera de resolver problemas que son fundamentalmente de caracter domestico puede escalar a una situacion regional sin precedentes. Los organos regionales no han apostado a la mediacion la cual constituye un principio elemental de las relaciones internacionales y de los mecanismos de integracion.

La usurpación usurpada del poder

El poder usurpado se resuelve con una nueva usurpación. Se usurpan las formas y las expectativas de la ciudadanía en marcha. El derecho camina detrás de la política, y ahora tambien de la geopolítica.

Lo inconstitucional constituye una larga travesía de inconsistencias jurídicas. Afortunadamente la política es hija de la justicia y sera la que resuelva en este y en los próximos momentos.
 
La deriva

Estamos en un momento de incertidumbre y de una posible deriva que pone en riesgo la República. A 200 años de Angostura se impone el sosiego y la reivindicación de la política como el arte del consenso.

Las salidas deben descansar en el reconocimiento del otro pero, sobre todo, en la sustitución de la agenda de guerra en marcha por una agenda social y popular que trascienda la polarización ahora reinventada en discursos y acciones.

Cualquiera sean las consecuencias las cartas han sido echadas y todo fue buscado.

Caracas
24 de enero 2019




a la/s enero 24, 2019 No hay comentarios.:
Compartir

miércoles, 23 de enero de 2019

23 de enero 2019: de persistir la polarización será una nueva desilusión para Venezuela. Vladimir Aguilar

23 de enero 2019: de persistir la polarización sera una nueva desilusión para Venezuela.
Vladimir Aguilar Castro
Universidad de Los Andes.

El 23 de enero del 2019, como corolario de la declaratoria de usurpación del poder de Nicolás Maduro por parte de la Asamblea Nacional, constituirá, de persistir la polarización, una nueva desilusión para quienes creían que ese día se iba Nicolás Maduro de Miraflores.

Lo cierto es que cada uno de los bandos encontrados en el esquema de polarización existente en el país desde hace 20 años, ha pateado e interpretado la constitución a su antojo. Luego de que esta fuera aprobada ha transitado en medio de los avatares de los polos enfrentados.

En efecto, como ya lo hemos señalado en otras oportunidades, un contrato social que debe servir para marcar la hoja de ruta de cualquier sociedad, en Venezuela tiene su propia historia de lealtades y traiciones. Entre el año 2000, fecha de su aprobación, hasta el año 2007 fecha en que se pretendió su reforma por parte del gobierno, tuvo como principal defensor al oficialismo. No obstante y desde entonces, la oposición entraría por el redil de su reconocimiento teniendo como momento álgido el triunfo electoral en las elecciones parlamentarias del 2015.

Sin embargo, el desvarío vuelve a atrapar a unos y otros cuando, a raíz de los resultados parlamentarios prácticamente el ejecutivo inhabilita al legislativo, y en vez de existir una colaboración entre los poderes surge una constante confrontación, hasta el dia de hoy.

Desde el año 2017 la constitución es interpretada por el mejor postor. La convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) en forma irrita marca el inicio de unos tiempos constituyentes en el imaginario único de quienes lo promueven. 

El país sigue su extravío en medio de usurpaciones, indefiniciones y deformaciones del texto constitucional, no viendo en este el mecanismo de solución de controversias sino de su profundización.

Así llegamos al día de hoy. Una crisis profunda en lo económico y social que todavía no se acompasa con los momentos de crisis política que vivimos, a menos que la lucha social y popular trascienda y determine la agenda parlamentaria. Una economía arruinada sin traducción política aun, es la unica certeza que tiene Venezuela en este año que comienza.

Por ahora, el 23 de enero del 2019 ha sido una manifestacion de fuerza con un claro propósito de indicarle al poder constituido que la gente no esta dispuesta a que la sigan gobernando de la vieja manera, y que ante el fracaso de su gestion todos deben irse. Una relegitimacion total y definitiva de todos los poderes es un asunto pendiente de la democracia en el país.

23 de enero 2019
(Caracas, autopista de Prados del Este)
a la/s enero 23, 2019 No hay comentarios.:
Compartir
‹
›
Página Principal
Ver la versión web

Acerca de mí

vladimir aguilar
Ver mi perfil completo
Con tecnología de Blogger.